La Mulan de la Festa

Mulan es sin duda una de mis películas favoritas de la infancia. La figura de la mujer en esta historia es muy diferente a la gran mayoría de Disney: una joven que se hace pasar por hombre para salvar a su padre, mayor y enfermo, de ir a la guerra. Nadie se percata de ello hasta pasados muchos minutos de la película.

Una historia similar es la de Fannu, una mujer almorávide que murió defendiendo Marrakesch, también haciéndose pasar por un hombre.

Hasta la figura de Fannu ha llegado la primera mujer que será Alférez de las fiestas de Moros y Cristianos de Alcoy: Ana Gisbert Mira-Perceval.

Como un paso más en el avance de la mujer en la Festa, ella ocupará dicho cargo como un sentido homenaje a su padre, y aunque soy de la opinión de que la normalidad es la actitud a adoptar en esta tesitura, cuando echo la vista a pocos años atrás o me vienen a la mente ciertos comentarios, soy consciente de la relevancia que esto tiene y del camino que espero que abra, el de un festero o festera disfrutando y haciendo disfrutar, sin que se tenga tan presente si es hombre o mujer, algo muy lógico en cualquier ámbito de la vida, pero que no lo era tanto en la Festa alcoyana hasta hace relativamente poco tiempo, y que no lo es todavía para muchas personas.

¿Rigurosidad histórica como argumento? Considero que habría que analizar mucho esa argumentación, partiendo de la base de que ese motivo se aplica especialmente para ciertas cosas, y no tanto para otras.

Pese a todo, sin duda, me quedo con el brillo de los ojos y la constante sonrisa de Ana en la entrevista que nos ha concedido, y a la que –si me lo permite– me tomo la libertad de bautizar como la Mulan de la Festa.

SHEILA GARCÍA. Periodista de El Nostre Ciutat

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