Maria de l’Olivar lleva la danza española al Conservatorio
La bailarina ha enseñado una coreografía entera de fandangos y bulerías al alumnado
Maria de l’Olivar ha sido la profesora invitada para impartir clases en la semana cultural que el Conservatorio de Danza de Alcoy organiza anualmente. La joven valenciana, durante toda la semana, ha estado perfeccionando la técnica de danza española del alumnado alcoyano matriculado a partir de 2° curso de Grado Elemental y los tres cursos de Ampliación de Estudios.
Los estudiantes de danza han tenido el placer de recibir lecciones en la danza española de mano de una profesional joven y con una gran trayectoria. La bailarina, fue formada en el Conservatorio Profesional de danza de Valencia, finalizó en el conservatorio de danza Carmen Amaya de Madrid. Durante su trayectoria ha sido artista invitada de baile flamenco en producciones del Ballet de Cataluña y su experiencia incluye la participación en el proyecto inclusivo de danza contemporánea de Sinffin Producciones destacándose como artista invitada en escuela Pista de bolera y flamenco, con numerosas actuaciones en el Teatro Apolo de Barcelona, Gran teatro de Elche, Teatro Gayarre de Pamplona, Teatro Fortuny Reus, entre otros.
Durante estos días que ha estado en Alcoy, la bailarina ha profundizado, de entre todos los palos flamencos, en los fandangos para los más pequeños, y en las bulerías en los cursos más avanzados. Sin embargo todas las clases han tenido un claro objetivo: saber estructurar las coreografías. Así pues, durante la pasada semana, Maria de l’Olivar fue mostrando fragmentos de coreografías hasta acabarlas el viernes.
La semana cultural del Conservatorio de Danza de Alcoy permite al alumnado aprender más danza, conocer diferentes formas de trabajo y estilos, y profundizar en la base que ya tienen. “En esta semana han visto el trabajo de una profesional de la danza y esto es beneficioso para que conozcan un poco más sobre ella”, afirma Maria.
Pero la característica que más resalta de las clases magistrales es que ofrecen a los futuros bailarines una oportunidad de salir de la monotonía del curso gracias a la presencia de relevantes profesionales con bagaje en el mundo de la danza. En esta línea de l’Olivar, asegura: “Las alumnas se han adaptado perfectamente. Al final son clases diferentes que están acostumbradas a hacer y, a pesar de que hayan tenido cierta dificultad, han respondido rápidamente”.
Más allá de lo meramente técnico, la artista invitada ha tenido claro el mensaje que ha querido transmitir en sus clases: la lucha por los sueños. Y es que, después de sus años dedicados a la danza, ha podido comprobar que es lo que más le llena. “La danza siempre me ha permitido expresarme. Si me subes a un escenario para hablar, no diré nada, pero bailando, lo digo todo”. Con toda esta esencia tanto profesional como personal, la artista ha dejado huella a los futuros bailarines alcoyanos, que hacen sus primeros pasos en el Conservatorio de Danza.