De Caramanxel a la Premier inglesa
Marcos Abad repasó su trayectoria hasta llegar a la élite del fútbol
El deporte es generador muchas veces de historias fascinantes. Algunas motivadoras, otras inspiradoras. Una de ellas es la base del éxito que llevó a transformar la vocación de un niño que de pequeño soñaba con colocarse algún día bajo los palos de una de las dos porterías del Collao, a sentarse en el banquillo de los mejores escenarios de la Premier inglesa.
Desde hace cinco años la carrera de Marcos Abad no ha dejado de crecer. Acaba de renovar por el Leeds como entrenador de porteros hasta 2025. Su historia, la de aquel niño que empezó a labrar sus sueños en la Escuela de Caramanxel, sirvió de hilo conductor en la charla impartida el lunes a la Sala Ágora bajo el título “De la base a la élite… Las enseñanzas del camino”, que sirvió para inaugurar la programación de la semana grande del deporte de nuestra ciudad, que culminarán este fin de semana con la celebración del Deporte en 3D.
Inicios complicados
Fue algo más de media hora de destripar muchos secretos del deporte de élite, pero sobre todo de conocer algunas claves de alguien que hace un par de años pasó a formar parte de la primera generación de entrenadores de porteros con licencia UEFA.
Muy atrás en el tiempo quedan aquellos inicios en el Alcoyano de la mano de Paco López en los cuales tuvo que convivir con la desconfianza de tener que dirigirse diariamente con porteros que casi le duplicaba en edad y recelaban de sus métodos. “Esto no va de buena suerte, ni de tener buenos contactos para promocionarte, va de trabajar mucho y de buscar la suerte a través del trabajo”, aseguró al recordar los suyos, cuando era un chaval cargado de ilusiones e inocencia.
Al referirse a aquellos comienzos no pudo evitar emocionarse un instante al referirse a uno de sus padres deportivos, el ex árbitro Raimundo Correcher, quién le introdujo en el mundo del arbitraje con la visión de fomentar “no solo la llegada de gente joven, potenciando así el arbitraje local, a nosotros también nos permitía ganarnos unas monedillas que nos vendían muy bien para nuestras cosas”.
> LEA EL REPORTAJE COMPLETO EN LA EDICIÓN DEL SÁBADO 11 DE JUNIO DE EL NOSTRE CIUTAT.