El guardián del Benicadell puso el brillante colofón

La Escuadra Especial de los Ligeros fue como una vuelta al pasado, con esos inicios de escuadras tribales y de inspiración africana

Rafael Aracil, desfilando sobre una carroza, en la Entrada Mora. ALDEMAR

Rafael Aracil López, alférez de la filà Ligeros lleva ya una larga trayectoria festera a sus espaldas. Primer tro de su filà, cargo en la Associació de Sant Jordi y componente de escuadras especiales. Su desfile ha representado un personaje real de la época que custodiaba el castillo de la peña Benicadell, ‘Alí Ben Mutalit’ y se convirtió en el perfecto cierre para una Entrada plena de grandes sensaciones y sorpresas

Acompañado de su familia, el boato ha hecho guiños a sus orígenes y sorpresas dedicadas a personas importantes en su vida como festero.

El desfile ha comenzado con jinetes ligeros y el embajador moro y su abanderado. Estos daban pie a las primeras carrozas con catapultas, y los grupos de ballet y boatos. Las carrozas de emires y damas han sido la previa para el alférez y sus favoritas, que han aparecido acompañados de un ballet, una carroza con guardias de las favoritas y una escuadra especial finalmente.

La escuadra especial cerraba la alferecía, el desfile y la entrada la escuadra especial. Fue como una vuelta al pasado, con esos inicios de escuadras tribales y de inspiración africana que se pusieron de moda en otras décadas y que Juanín Climent actualizó para el cargo.

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