Control de acceso a la Font Roja durante este mes de abril
Hasta mayo –excepto los días 23 y 24–, sábados y domingos por la mañana
El concejal de Transición Ecológica, Jordi Silvestre; el director-conservador del parque natural de la Font Roja, Salvador Palop; y la presidenta de la Asociación de Turismo Alicante Interior, Indira Amaya, comparecieron recientemente para explicar cómo funciona el control de acceso al parque, mediante una barrera automática ubicada en el kilómetro 1 de la carretera de lleva al santuario, como también aclarar algunos términos de esta regulación, a raíz de que un propietario haya recogido 427 firmas pidiendo el cese de la medida argumentando que está perjudicando a los usuarios de dicho acceso y denuncia, además, una caída de clientes del 20% en los establecimientos ubicados en la zona afectada por el cierre.
“Es una cuestión que tiene que ver con la carga que puede soportar el parque” a nivel de visitantes y en aras de garantizar una correcta evacuación en caso de registrarse un incidente, como pueda ser un incendio forestal, porque “era un peligro” en momentos en que se producían aglomeraciones en la zona del ecocentro, aparcándose a ambos lados del arcén hasta dos kilómetros abajo, remarca Silvestre.
Tal y como ha informado este periódico, el objetivo es controlar el acceso en situaciones climatológicas adversas (temporales de nieve o alertas por altas temperaturas, entre otras) y en momentos puntuales en que se viene detectando “una elevada presión de visitas que sobrepasan la capacidad de carga”, tales como Semana Santa, la primavera, o puentes festivos en otoño. Respecto a la regulación propiamente, la barrera automatizada con lector de matrícula empezó a funcionar el pasado sábado y domingo, y ya los siguientes fines de semana, hasta mayo –menos el de fiestas de Sant Jordi–, en horario de 8 a 14 horas. El aparcamiento en la Font Roja está limitado a 50 plazas y se puede reservar enviando una solicitud por correo electrónico al parque.
Salvador Palop señala que en estos momentos en que esté vigente el acceso regulado, los propietarios de fincas tienen “acceso permanente” –con un código personal– y para los clientes de las casas rurales, hosteleros, restauración, empresas de servicio y taxi, también podrán acceder “de manera libre, previamente poniéndose en contacto con el establecimiento”. Para ello, aclara Palop, existe una coordinación constante con la Asociación de Turismo por parte de la dirección del parque natural.
En este sentido, también matiza que se trata de una decisión “muy pensada” que no responde a criterios “aleatorios” y que se ajusta a la normativa referente a los usos del parque, como también incide en que se acordó con la Diputación de Alicante, que es la titular de la carretera CV-797.
Por parte de la Asociación de Turismo, Indira Amaya explica que para las empresas asociadas que operan en la Font Roja –Masía La Mota, La Safranera, Bons Aires, Masía El Pare Sant y restaurante del santuario– la medida no ha causado perjuicio porque “al trabajar con reservas previas” en la mayor parte de los casos “es fácil de gestionar”. Por eso, subraya, “estamos de acuerdo en regular” de cara a “proteger” el parque natural.