Antoni Miró: “Como alcoyano y ciudadano no se puede pedir más”

Antoni Miró es ave nocturna, así que para llamarle por teléfono y pedirle una valoración sobre su reciente reconocimiento –será Hijo Predilecto y recibirá la Medalla de Oro de Alcoy– mejor esperar al ocaso. “Como alcoyano y ciudadano no se puede pedir más, aunque el reconocimiento es un poco tardío”, afirma el pintor. Lo habitual es que este tipo de reconocimientos se otorguen hacia el final de una carrera, aunque en el caso de Miró no se puede decir que nos encontremos en el epílogo de la suya. “En mi opinión aún estoy empezando. Voy a resistir lo que haga falta”.

Para una persona que habla sin ambages y que tiene una ideología política tan marcada, uno se pregunta si los parabienes institucionales pueden resultarle incómodos. “Con la izquierda no tengo problema, porque es donde yo estoy más alineado. Sin embargo a la derecha le cuesta reconocer cierto tipo de cosas. Eso no debería pasar; la política no debería interponerse en el bien común”.

Con la asignación del título, Antoni Miró se une a una lista donde ya figuraban dos de sus mayores amistades, Ovidi Montllor e Isabel-Clara Simó. “De alguna manera siempre hemos estado unidos. Me siento muy honrado de formar parte de esa tríada de personas que han luchado tanto por Alcoi, por su cultura, y por su lengua”.