Solo el 25% de los edificios inspeccionados reciben el visto bueno
La borrasca Gloria azotó con fuerza a Alcoy a principios de este año, puesto que las lluvias, la nieve y el viento, unidos al cuestionable estado y antigüedad de gran parte de los edificios del Centro de la ciudad, provocó numerosos derrumbes y un lamentable fallecimiento en una de esas caídas de inmuebles.
A consecuencia de estos hechos, comenzó a recopilarse información concreta del estado de los inmuebles del casco histórico para conocer la situación y las medidas que se debían llevar a cabo.
En una jornada celebrada en Alcoy en febrero, el IVE (Instituto Valenciano de la Edificación), ofreció estos datos, los cuales mostraban que 79 edificios de un total de 3.513 de más de 50 años presentaban “riesgo”.
En dicho mes se iniciaron las inspecciones correspondientes y ya se conocen los datos de estas.
Finalmente, se consideraron un total de 81 expedientes de edificios, de los cuales, se ha podido llevar a cabo las revisiones, ya sea por el interior como por el exterior, de 58. Respecto a los 23 restantes se indica que ha sido imposible inspeccionarlos por tratarse de edificios sin datos de contacto o por falta de respuesta de los propietarios, entre otros motivos.
La concejala de Urbanismo, Lorena Zamorano, apunta que “esos 81 edificios considerados inicialmente son los que los técnicos del Ayuntamiento de Alcoy valoraron que se tenían que revisar de forma urgente” y añade que los 23 que no se han podido inspeccionar “a nivel municipal ya tenían abierto el expediente”.
Tras las inspecciones de los 58 edificios “se emiten unos informes rápidos que valoraban los edificios según su estado, la urgencia que tuviera de intervención y las consecuencias de las enfermedades que sufrían los inmuebles”, comenta la edil.
Así, dichos informes indican que de los 58 edificios, el acceso está permitido en 15 de ellos, restringido en 27 y no permitido en 16. Esto se traduce en que, los señalados como acceso permitido no presentan daños estructurales pero sí pueden albergar manchas de humedad, daños en carpinterías y revestimientos.
En este sentido, tan solo el 25% de los inmuebles revisados han obtenido el visto bueno en estos primeros informes. Por otro lado, aquellas fábricas en equilibrio inestable, o donde haya daños en instalaciones con riesgo para los usuarios, o fugas insalubres, entre otros aspectos, han sido calificados como restringidos. Por último, los edificios donde el acceso no está permitido se debe a que existe un colapso de elementos estructurales, descalce a la cimentación o deformaciones de forjados por acumulación de agua, entre otros motivos.
“La valoración no puede ser positiva, el estado en el que se encuentra el casco histórico es el que es”, afirma Zamorano, quien trata de ver el vaso medio lleno argumentando que tanto la DANA como Gloria “nos han hecho ser más proactivos en el tema y no ser tan flexibles con los propietarios” y añade que “si hace falta poner mulas, no solo porque es la obligación de los propietarios, si no porque se ha visto que no cuidando los edificios ponemos en peligro la vida de los demás, vamos a ser más firmes”.
La concejala de Urbanismo anuncia que actualmente se está trabajando en un plan de todo el casco histórico con actuaciones concretas para revitalizar zonas y que “hemos llegado a acuerdos con la conselleria de Vivienda para que Alcoy pueda tener ayudas específicas porque aquí Gloria fue muy grave, es un proyecto del que pueden salir otros muchos proyectos para el Centro”.
Foto: Edificio de la calle Sant Agustí que se derrumbó el pasado mes de enero | Archivo