Prorrogan el contrato a Aqualia sin descartar la recuperación del servicio
El tema de la prórroga del contrato a la adjudicataria de la gestión del agua, Aqualia, llegaba al Pleno precedido ya de un intenso debate, puesto que para la aprobación del presupuesto municipal de 2020, al que dio apoyo Podem, el gobierno se había comprometido con la formación morada a iniciar la remunicipalización de varios servicios públicos, incluido el agua potable. De ahí que la ampliación de la concesión a la empresa haya pillado de improviso a parte de la oposición municipal, que no entiende cómo ahora el gobierno socialista decide prorrogar la contrata un año, con posibilidad de otro más y hasta un máximo de cinco.
Sin embargo, desde el equipo de Toni Francés lo tienen claro y ven en la ampliación del contrato la única vía posible. “Este va a ser uno de los contratos de la legislatura y tenemos que tomárnoslo con tiempo”, señalaba el pasado viernes en el Pleno Jordi Martínez, portavoz del gobierno, quien en declaraciones a este periódico añadía que el objetivo es ganar margen de maniobra para unir a la gestión del servicio de agua potable, el de mantenimiento del alcantarillado, contrato al que aún le quedan unos años de vigencia.
el acuerdo | El gobierno municipal ha aceptado la creación de una mesa para la redacción de los estatutos de la futura empresa pública del agua
Una postura, no obstante, que no ha impedido al gobierno municipal aceptar las condiciones del “voto de confianza” de Podem, y no un “cheque en blanco”, en palabras de su portavoz, Cristian Santiago, que presentaba un ruego al Pleno pidiendo la creación de una mesa para la redacción de los estatutos de la empresa pública del agua, lo que supone dar el pistoletazo de salida a la desprivatización de servicio. Para Jordi Martínez, con la puesta en marcha de esta iniciativa se “inicia el debate” sobre el futuro modelo de gestión del agua potable. “Lo que sabemos es que no queremos una concesión”, recalca Martínez.
Con todo, la prórroga del contrato a Aqualia salió adelante con los votos a favor de PSOE y Ciudadanos –”por responsabilidad”, argumentan–, la abstención de Podem “ante el escenario actual”, así como el rechazo frontal a la medida del resto de grupos, que denuncian falta de previsión y “dejadez”, según Compromís, a la hora de encarar la finalización de la contrata, fijada para este 2020. Mientras, desde Vox destacan que “aquí se vende siempre lo público sin importar las consecuencias”, en referencia, indicó su concejal David Abad, a la pérdida de empleos en caso de retirar la concesión a una empresa.
Foto: Imagen facilitada del Pleno municipal celebrado ayer viernes de forma semipresencial