Lección de campeón

Uno de los lujos de nuestro deporte es Néstor Abad. El gimnasta ha disfrutado de unos días de descanso tras una ajetreada temporada que ha querido pasar en familia. Entre tantos viajes, competiciones en diferentes continentes y maratonianas sesiones de seis horas de entrenamiento diario, no le importó el pasado jueves poner en marcha la máquina del tiempo y retroceder a aquellos revoltosos años de su infancia, en los que encontró en la artística el espacio vital de sus ambiciones posteriores.

Durante dos horas hizo las delicias de una treintena de niñas y niños que acompañaron de un “¡Ohhhh!” de admiración, cada movimiento, cada explicación, de nuestro deportista más universal, olímpico por primera vez en Río 2016 y que todo apunta repetirá experiencia en Tokio 2020, ahora con mayor recorrido y más hecho como deportista de élite.

Por iniciativa del Centre d’Esports, ofreció una clase magistral, algo que según confesó al final, mientras no paraba de hacerse fotos y firmar autógrafos, alguno sobre la misma camiseta de entrenamiento, “me hubiera encantado poder disfrutar cuando tenía su edad, por ejemplo tener cerca a un Rafa Martínez, que era mi ídolo entonces. Ha sido una experiencia muy bonita, me han hecho sentir como si fuera uno más de ellos. Algunos han venido a decirme que soy su ídolo, un comentario que agradezco, pero yo me siento una persona normal”, explicó.

En la clase participaron alumnos de los dos clubes locales, CGA El Pastoret y CGA L’Esport, pertenecientes al grupo de iniciación y algunos que están dando sus primeros pasos dentro de la competición, puesto que sus mejores gimnastas estaban en una concentración de la Federación en Valencia.

Foto: Un momento de la clase magistral que Néstor Abad realizó. Xavi Terol