Defrauda
Otra vez se fue la afición defraudada del Collao, otra vez se vio un Alcoyano sin ideas, incapaz de ganar en superioridad numérica y previsible en ataque. Vimos una segunda parte donde el sistema –por llamarlo de alguna manera– era balones a Nieto y este con más ganas que efectividad poner el balón en el area donde, ninguno de todos los delanteros que empleó Mir, fue capaz de marcar. Defrauda ver un equipo al que es tan fácil marcar. Sigo pensando que no es por los defensas, es más bien que la presión cuando se realiza esta mal y que la media no sabe contener los ataques rivales, esto desborda a los defensas que se ven totalmente superados. Defrauda no ver ningún tipo de reacción en el banquillo, tampoco en la directiva que luego se queja de falta de apoyo. ¿Apoyo? Bastante hacemos los aficionados con seguir asistiendo al Collao, aunque cada vez somos menos cansados de ver un equipo que no da motivos para empujar y animar desde la grada, un equipo donde ningún jugador es capaz de, viendo cómo está el partido, de levantar los brazos y pedir apoyo al público, jugadores apáticos posiblemente porque son simplemente trabajadores del fútbol que están aquí de paso y los colores y el escudo les importa lo justo. Quizá con alguien de la casa en el banquillo que les inculcara qué es el Deportivismo o dentro del campo con jugadores de Alcoy o comarca que dieran todo por el equipo estas situaciones no ocurrirían, porque solo está Nebil y creo que no le veremos al chaval demostrar que lleva dentro. Defrauda ver que pese a tener a priori mejor plantilla que el año anterior la tónica es la misma, sufrir en cada partido y luchar por la permanencia. Defrauda ver el poco acierto con los entrenadores, excepción hecha de Seligrat, que han ocupado el banquillo las últimas temporadas: Cano, Palop, Galiana, Aparicio, Mir…. ¿Conocen el grupo? ¿Conocen el Club? La situación es difícil pero no irreversible, a tiempo de tomar soluciones. Mir debe continuar pero que se le exija a él y sus jugadores el rendimiento que deben mostrar y que merecemos los que vamos cada domingo al Collao, y si no es así que se tome una decisión, meditada pero que dé un impulso y renovación al equio.