Señor Puig, ponga orden
Con el pleno aplazado del mes de agosto, se da inicio al nuevo curso político. Un curso político que nos llevará a las elecciones municipales y autonómicas que se celebrarán el próximo mes de mayo. Y un inicio de curso que ha llegado marcado por la puesta en evidencia de las malas relaciones entre los socios de gobierno en la Generalitat, Psoe y Compromís.
Era un secreto a voces, pero lo peor no es que nos hayan tenido engañados 3 años, lo peor es que durante estos 3 años de gobierno del Botànic, los valencianos, y los alcoyanos, nos hayamos visto perjudicados por una total inoperancia o por decisiones con un claro tinte político, como en el caso de la educación concertada o la sanidad.
Y de sanidad se habló en este pleno. Una moción presentada por el Partido Popular pedía que la Consellería de Sanidad rectificara y diera solución a la grave situación generada con el nuevo servicio de ambulancias. No se le puede permitir a una Generalitat que venía a “rescatar personas”, que los sanitarios vayan al “rescate” de los enfermos de urgencias en su coche particular o en taxi. Y menos, que aquellos que proclamaban a los cuatro vientos los recortes del PP en época de crisis, se dediquen a recortar 34 millones de euros precisamente en un sector de primera necesidad.
Era algo tan evidente lo que el Partido Popular planteaba que la moción, como no podía ser de otra forma, salió adelante. Lo curioso fue el debate que se desarrolló y el reparto de la votación.
Por un lado, Guanyar Alcoi que no puede soportar que el Partido Popular presente propuestas beneficiosas, llegándose a sorprender de la vena solidaria del PP. Como si a las personas del Partido Popular no nos preocupara nuestra salud y la de nuestros enfermos. Señoras y señores de Guanyar, en lo que no estamos de acuerdo es en el modelo “públic i en valencià” que ustedes imponen, convirtiendo la sanidad en una agencia de colocación para sus afines. Por eso el Partido Popular defiende la colaboración público privada, que como en el caso de las ambulancias y dándonos la razón, “su gobierno del Botànic” ha adjudicado a una empresa privada.
Pero lo más chocante fue la votación de Compromís y Psoe. Los primeros no sorprenden, y entregados a la disciplina de la todopoderosa Oltra, votaron en contra a la moción, que lo único que pedía era que se resolviera el problema de manera consensuada. Los socialistas, una vez más utilizaron la técnica del avestruz, esconder la cabeza debajo del ala y votar abstención. Preocupante para Alcoy tener un gobierno municipal que no se moja en temas tan importantes.
La otra moción que se debatió fue la presentada por el Psoe sobre la Ley de Contratos del Sector Público. Una Ley sobre la que todos los grupos políticos sin excepción coincidimos en elogiar, algo que para el Partido Popular tiene un enorme valor si tenemos en cuenta que la Ley se aprobó en 2017 siendo presidente Mariano Rajoy. La moción fue respaldada por todos los grupos políticos a excepción de Ciudadanos, que sorprendentemente se abstuvo, tratándose de una moción que únicamente proponía habilitar medidas que permitieran una simplificación de la Ley, algo que beneficiaría sobre todo a los municipios más pequeños.
La anécdota del pleno la protagonizó la puesta en conocimiento por parte del PP de un correo en el que la concejal de bienestar social aludía a que la oposición no debía tener determinada información, y a lo mal que lo estaba haciendo la Conselleria de Mónica Oltra, calificando su gestión de “desastre”. Algo, esto último, en lo que no podemos estar más de acuerdo pero que evidencia una vez más la mala relación entre los dos socios de gobierno en la Generalitat. Por eso le pedimos desde aquí a su máximo responsable, el Presidente Ximo Puig, que ponga orden por favor.
Rafa Miró es portavoz del PP en el Ayuntamiento de Alcoy