Un mal arbitraje estropea el final de liga del Alcodiam
Si no era bastante un final de temporada que se le ha hecho largo al Patín Alcodiam, llegando con el depósito de combustible en la reserva, otro lamentable arbitraje estropeó la despedida liguera en el Pavelló Olímpic de Vic. Una derrota que sumado al empate del Lloret en Igualada ha llevado a los de Sergi Punset a perder dos puestos en la clasificación y caer hasta la decimotercera plaza, una posición que hubiera firmado antes de iniciar el curso, pero con el equipo compitiendo al final de la primera vuelta por una plaza en la Copa del Rey y peleando por regresar a la CERS durante gran parte de la segunda vuelta, llevan a pensar que sabe a poco este final de curso.
En cualquier caso, el objetivo de la permanencia se logró hace tiempo con mayor solvencia que otros años, si bien es verdad que el equipo por diferentes circunstancias ha estado cada vez más apartado de su mejor versión y la consecuencia ha sido ese desplome final en la clasificación.
En la despedida liguera, Sergi Punset apostó por dar minutos a los que menos han jugado esta temporada. El más beneficiado por esta decisión fue el portero Manu Monje, que disputó todo el encuentro, estrenándose de esta manera en la OK Liga. También los canteranos Carlos Cantó y Vicent Marí entraron en la rueda de cambios y regresó Pere Cañellas, presente en el quinteto inicial, tras sus cuatro partidos de sanción.
En el Pavelló Olímpic se pudo ver a un Alcodiam atrevido pero al que le cuesta un mundo convertir sus ocasiones. Así y todo se fue al descanso con ventaja en el luminoso. Se encargó Mathias Arnáez de abrir el marcador, segundos después el veterano Mia Ordeig, que junto con Borja López siguen marcando las diferencias en el Vic pese a la edad, establecía el empate y a menos de dos minutos del descanso Pere Cañellas puso el 1-2 con el que acabó el primer tiempo.
El inicio de la segunda parte iba a coger al Alcodiam con el pie cambiado. En cuestión de segundos el Vic le daba la vuelta al marcador para ponerse 3-2, Roc Llisà tres minutos después restableció la igualada pero diez minutos fatídicos en los que la pareja arbitral decantó el partido con sus decisiones dejaron el marcador en un inalcanzable 6-3 para el Alcodiam. Mientras que los rojiblancos quedaban en cinco faltas, los de Sergi Punset se disparaban hasta las doce, con directo y penalti para terminar de poner la puntilla a los azulgranas. La plantilla ya está de vacaciones y no regresará al trabajo hasta el 13 de agosto.