90 minutos que valen un título
No son buenos tiempos para el fútbol local que deambula sobre una fina línea que le sostiene de la amenaza de desaparición. Su liga está herida de muerte desde que afloró ese empeño por salir a competir en el exterior que ha dejado su competición bajo mínimos y con un campeonato desigual en el que todo el interés se ciñe a lo que suceda en los dos enfrentamientos directos entre los dos principales candidatos al título.
El CDC es el equipo que viene dominando la competición con una autoridad aplastante. El desaparecido Inter Alcoià fue el último club que consiguió destronar a los Carniceros en la temporada 2012/13. Un relevó que tomó el histórico At. Salesiano, que hace un par de campañas estuvo cerca de dejar a un lado su sequía de títulos y un solo gol –empataron a 61 puntos– le separó de cantar de nuevo el alirón casi dos décadas después (desde la temporada 99/00 que no es campeón). En la actualidad su máximo oponente es el Imperial, un club sin demasiado pedegrí dentro de la liga, pero que ya el año pasado estuvo muy cerca de ganarle el título, quedando subcampeón y llevándose la Copa tras derrotarle 2-0 en la final.
En la primera fase de la competición, los Carniceros ya dieron muestras de que iban a aferrarse con todas sus fuerzas al título y que pelearían hasta su última gota de sudor por conquistar el honorifico título de campeón de invierno, como así terminó sucediendo. Se enfrentaban ambos equipos en la última jornada, al Imperial que estaba invicto le bastaba con el empate, mientras que el CDC necesitaba vencer. Los verdiblancos se adelantaron con un gol de Omar Galiana a los diez minutos y el propio goleador del Imperial gozó a renglón seguido de un penalti que hubiera puesto el marcador en 2-0. “Lo lancé fuera, me equivoqué y luego en la segunda parte nos tiramos mucho atrás. El CDC es un equipo que se conoce muy bien, que lleva muchos años jugando con la misma base de jugadores y no te perdona, a la mínima que tiene te marca y estás perdido”, recuerda Omar Galiana, de 27 años, que ya suma 17 goles esta temporada, nueve en la primera fase de la liga y ocho en play-off por el título.
Casi tres meses después de aquel encuentro, volverán a verse las caras y la situación se repite para ambos. Será mañana desde las 9 horas en el campo nº 2 del Serpis, en el duelo que cerrará la temporada 2017/18. Al Imperial, que es líder y aún no ha perdido ningún encuentro en esta segunda fase de la competición, le basta otra vez con la igualada. Los Carniceros, que defienden título, están tres puntos por abajo en la clasificación y deben salir a ganar. “No nos vale otro resultado”, reconoce Nacho Jordá, de 31 años, el 10 de los Carniceros. “Ellos tienen dinamita pura arriba. Está Omar, tienen a Alexis, a Mauro… Encima cuentan con Dani Rico, que si no es el mejor portero local, está entre los mejores. Nos conocemos muy bien y será un partido tremendamente igualado, como ha sucedido en los últimos que hemos disputado. En enero pasado decidieron los pequeños detalles. Con 1-0 en contra y una expulsión pensaba que el partido era de ellos, pero en la siguiente jugada a quedarnos con diez logramos el empate y nos lo creímos, insistiendo hasta que conseguimos marcar el segundo”.
Los dos cuentan con un amplio bagaje en la liga y dicen sentir añoranza de aquellos años cuando empezaron a jugar a nivel local. “No tiene nada que ver con lo que se ve ahora, que a veces da pena. Habían dos categorías de adheridos, quince o más equipos en las ligas infantil, cadete y juvenil. Ahora solo hay una categoría de adheridos y no hay descensos, con lo que te encuentras a equipos que están por abajo que no se presentan o van ocho o nueve jugadores a jugar el partido porque saben que no les pasará nada. Prefieren jugar en regional, cuando son ligas que muchas veces su nivel está por debajo de lo que tienen aquí. Hay equipos que está bien que salgan fuera a competir, pero otros que no entiendes que se lleven siete u ocho goles tras pegarse un madrugón y para qué. Encima, la mayoría trabajamos, aquí tenemos un cierto respeto por el rival, fuera en cambio no te conocen y si tienen que meter la pierna, no se lo piensan. Creo que merece una reflexión el futuro de la liga, de lo contrario está más muerta que viva”, aseguran Nacho Jordá y Omar Galiana.