100 años de la Biblioteca Musical Víctor Espinós
Madrid posee una de las bibliotecas musicales más grandes de toda España, la cual fue creada hace ya 100 años por el alcoyano Victor Espinós
La Biblioteca Musical de Madrid lleva en la actualidad el nombre de su creador, el alcoyano Víctor Espinós que tuvo la idea hace ya 100 años de crear una biblioteca pública especializada en música para la ciudad de Madrid.
Desde un primer momento, Víctor Espinós pensó en ampliar el servicio de biblioteca con un préstamo gratuito de instrumentos, pero por diversas circunstancias fueron aplazando la realización de esta idea, entre las causas la falta de recursos económicos.
Fue a finales de 1932 cuando el Ayuntamiento dio conformidad para que se realizara este servicio pionero en toda Europa. Por ello, al igual que cuando se creó la Biblioteca, el alcoyano solicitó ayuda a músicos e instituciones que le secundarían en sus peticiones, conscientes de la importancia de este servicio. “Ahora hay instrumentos por 100 euros, pero antes era un lujo y Espinós fue un hombre que trabajó mucho en ese sentido para acercar la música a todos los públicos”, explica el alcoyano y compositor José Mª Valls Satorres, quien añade: “En Alcoy hay una calle con su nombre, pero no ha sido muy reconocido. Ahora, desde su propia biblioteca han visto que tenían que reconocer este trabajo por el aniversario de los 100 años, pero siempre quedan cosas en el tintero”.
Durante muchos años, estas instalaciones acogió a muchas celebridades del mundo de la música como Igor Stravinsky, quien firmó sus partituras para cederlas a esta Biblioteca Municipal.
En 1930, su hermana Juana Espinós comenzó a trabajar en este espacio. Una mujer culta, que hablaba tres idiomas y que ejerció la crítica musical en el diario Madrid durante 27 años. Juana Espinós estuvo al cargo de esta institución hasta su jubilación en 1978, dedicando toda su vida profesional a la Biblioteca Musical. Ahora, tras 100 años de historia este espacio sigue ofreciendo los servicios creados por Víctor Espinós.
Actualmente, dispone del préstamo y consulta de partituras y materiales audiovisuales, el préstamo de instrumentos y de cabinas de estudio, además ofrece actividades como conciertos, conferencias, talleres didácticos y otros eventos, que volverán cuando termine la pandemia. “Es un lugar enorme con una gran variedad de libros y partituras y donde la gente puede beneficiarse del préstamo de instrumentos. Las instalaciones son inmensas, hay que ir para verlo”, explica Satorres, quien tuvo el placer de conocer a Juana. Satorres disfruta todavía del espacio después de muchos años: “Siempre he estado muy unido. Todo el trabajo que ha hecho se mantiene en cien años y es muy importante para el mundo de la música y para los alcoyanos”, concluye.