El viaje de Beramendi
En Alcoy, y gracias especialmente a la pluma de Adrian Miro, tenemos noticias de la visita de turistas extranjeros durante el siglo XIX, que de paso nos han dejado estampas imborrables de la sociedad alcoyana de aquella época. También se supone pasaron viajeros nacionales, como Cavanilles, cuyo recuerdo todavía perdura entre nosotros. Sin embargo hubieron otros que tal vez no dejaron tanto rastro, como por ejemplo el Intendente Carlos Beramendi, y a él voy a referirme.
Este personaje realizo el viaje durante los años 1793-94, apenas dos años después de que lo hiciese el insigne botánico Cavanilles y ese fue el motivo de que le diese a su crónica un enfoque totalmente diferente.
El resultado fue un mamotreto de alrededor de mil páginas, que no siguen una secuencia lógica en su itinerario por lo que nos hemos basado en el resumen de apenas 155 folios, que don Emilio Soler de la Universidad de Alicante nos hace de su paso por la Comunidad Valenciana y de las cuales 33 corresponden a Alcoy.
Beramendi tenía una especial predilección por Alcoy, y aunque hizo todo su recorrido por nuestro Reino bordeando el mar, al llegar a nuestra altura no tuvo ningún inconveniente en abandonar la costa e internarse en el interior. Cuando llegó a Altea se desvió hasta Alcoy para luego regresar a Alicante por Jijona.
“…a una hora (de Altea) pasé por el lugar de La Lucia (La Nucia), dejando a medio cuarto de legua, y a la derecha, a Polop; caminé tres horas, para entre montes sin cultivo, al cabo de las cuales atravesé por el lugar de Benifato; y a una hora después Confrides, desde aquí se empieza a subir el puerto de ese nombre de malísimo camino y a dos horas y media se pasa por el lugar de Agres, empezando a ver olivos, viñas y trigo; a una hora se cruza por Benasau; y atravesando a media hora por Benilloba, y a una por San Rafael, se entra en la villa de Alcoy vadeando el rio Serpis”.
El Señor Soler no se da cuenta del gazapo que esconde este párrafo y solo se extraña de la presencia de Agres al indicar: “El itinerario seguido por Carlos Beramendi para llegar a Alcoy es una tanto sorprendente para el que realizaríamos ahora”.
Es imposible que pudiese ir de Confrides a Agres en dos horas y media y mucho menos que regresase a Benasau en solo una, por lo que está claro que no paso en ningún momento por la villa de Mariola y el lugar que sustituye a esa población solo puede ser El Abdet. Entonces sí que salen las cuentas.
Por razones que no vienen al caso, en cierto momento del pasado sentí curiosidad por saber cuánto tiempo se tardaba en llegar a Alcoy desde la costa en esa época. Según Beramendi el trayecto duraba 10 horas aunque supongo que se tardaria alguna mas si contamos el tiempo de paradas para comida y descanso. Ahora gracia a Beramendi he podido averiguarlo.
Son interesantes las conclusiones que este insigne viajero sacó de su visita a Alcoy y espero contárselas.