Educación amplía el plazo para devolver los libros de XarxaLlibres hasta el 11 de julio

La conselleria de Educación ha anunciado que amplía el plazo de presentación de solicitudes para participar en los bancos de libros en el marco del programa de gratuidad de material curricular #XarxaLlibres. Así, las familias que lo desean podrán acceder al formulario telemático hasta el próximo 11 de julio y, posteriormente, hacer la aportación de libros a los centros.

La decisión se ha tomado para dar más margen a la participación en el programa del alumnado que ha realizado las pruebas extraordinarias de julio y, también, por flexibilizar los plazos para aquellos centros educativos que lo necesitan. El objetivo es proporcionar las mayores facilidades posibles para que todo el mundo pueda acceder a la gratuidad del material curricular.

Así, a falta de redondear las cifras con las solicitudes que se puedan registrar hasta el próximo 11 de julio, la Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte ha registrado, hasta el momento, un total de 328.311 solicitudes para participar en la segunda fase de #XarxaLlibres y en la creación del Banco de Libros. De estas solicitudes, 107.625 corresponden a la provincia de Alicante, 40.550 a la de Castellón y 179.938 a la de Valencia.

Concretamente, las solicitudes acogidas para la segunda fase del programa han sido un total de 263.595, de las que 83.604 se han presentado en Alicante, 32.400 a Castellón y 147.591 a Valencia.

Por otro lado, el total de las solicitudes acogidas para participar en el Banco de Libros han sido 64.518. Por provincias, 24.021 corresponden en Alicante, 8.150 a Castellón y 32.347 a Valencia.

La Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte quiere expresar su agradecimiento a los equipos directivos, a los docentes y a las familias por el esfuerzo y la implicación que han demostrado en el procedimiento que ha permitido la creación de los bancos de libros.

Esta iniciativa tiene como objetivo garantizar la gratuidad del material curricular, conseguir que ningún alumno se quede sin libros por motivos económicos y educar en la responsabilidad por lo que respecta al buen uso del material. Y hay que señalar que estos objetivos no se podrían alcanzar sin su participación porque la educación es entre todos y todas.

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