Eduardo Barrios ha pasado unos días en su querido y añorado Alcoy
Quien no recuerda a ‘El Moro’ Barrios, ídolo del Collao a finales de los ochenta y principios de los noventa. Por unos días, ha abandonado su Ceuta natal y en compañía de su mujer Mari ha cumplido una tradición que se viene repitiendo año tras años desde que abandonara su querido y añorado Alcoy para volver a su casa tras colgar las botas en el Alcoyano.
En este equipo pasó los mejores años de su carrera deportiva. Fue una década en la que se ganó el corazón de todos los aficionados del Collao. Posiblemente haya sido el último gran ídolo del Alcoyano. Su forma de conducir el balón y su arrebatadora personalidad dentro de un campo todavía se recuerda por los seguidores blanquiazules más veteranos. Jugó con el Alcoyano en tres categorías diferentes.
En el año que llegó procedente del Benidorm, el equipo subió a Tercera División y dejó el fútbol en la temporada 93/94 en Segunda B. Cuenta que en las pachangas que semanalmente juega en su Ceuta natal, luce la camiseta del Alcoyano, una prueba irrefutable del amor a unos colores desde la distancia. En su estancia en nuestra ciudad se aloja en casa de otro mito del alcoyanismo, el ex masajista Manolo Cano, otro personaje añorado y que nos traslada a un Alcoyano de otra época.