Borja Sánchez: primer ‘fichaje’ en el mercado de invierno

Cuando aún queda una semana para que se abra el mercado de enero, el Alcoyano ya tiene su primer fichaje invernal. Se trata de Borja Sánchez, una de las incorporaciones estrella del verano, pero al que una lesión de larga duración y la inactividad en toda la segunda vuelta del pasado curso tras quedarse sin equipo, le ha terminado por pasar factura y sus casi dos meses en el dique seco han sido una de las peores noticias de la primera vuelta para Palop.

Es por ello, que su regreso a los terrenos de juego se haya celebrado mucho tanto en las oficinas del club como de puertas hacia adentro del vestuario blanquiazul. Con su regreso a los terrenos de juego, el Alcoyano no solo recupera una de las piezas angulares del proyecto, sino un futbolista de altos vuelos que en cierta medida estaba en deuda con la entidad, ya que su fichaje en julio pasado obligó hacer un importante desembolso económico para cerrar la operación.

El abulense pasa por ser uno de los jugadores más caros de la actual plantilla. No en vano su último club antes de firmar por el Alcoyano fue el Kerkyra de la Súpder League griega, donde aterrizó en el verano de 2014 tras firmar una magnífica campaña en el Huesca, que junto a su paso por el Salamanca, con el que anotó 13 dianas, su tope goleador, han sido dos etapas en las que el hoy blanquiazul consiguió dejar huella. En tierras helenas no llegó a cuajar en aquel fútbol y acabó rescindiendo a mitad de competición, quedándose sin equipo toda la segunda vuelta.

Competencia en ataque

Borja Sánchez llegó a la Primera División griego tras firmar una gran campaña en el Huesca, con el que disputó 37 partidos, 35 como titular, anotando 5 goles como falso nueve. Con su fichaje el verano pasado, el Alcoyano lograba reunir un tándem de auténtico lujo para esa posición por detrás del delantero de referencia con Rubén Ramos y él: el abulense más dinámico y fajador, y el madrileño más indicado para el juego posicional y el último pase. Los mejores momentos del Alcoyano esta temporada coincidieron precisamente con ambos en plenitud física. Borja Sánchez fue el elegido por Palop como titular en los primeros encuentros ligueros, si bien Rubén Ramos se puso rápidamente las pilas y el madrileño no tardó en ganarse la confianza del técnico y recordar al enganche que marcó diferencias el pasado curso. Uno de los jugadores de la plantilla más beneficiados por el buen momento de ambos y la competencia que se generó entre ellos elevando el nivel de competitividad en ataque fue Yacine, que se destapó como un delantero potente y con gol en el primer mes y medio de competición.

Casualidad o no, lo cierto que la lesión de Borja Sánchez y el paso por la enfermería del abulense coincidió con el progresivo desplome del Alcoyano, que poco a poco se fue apagando y en la actualidad es una sombra de aquel equipo que fue capaz de pasar por encima de Reus y Villarreal B y firmar buenos partidos en casa del Olot y Levante B, pese a la derrota. El Alcoyano actual echa en falta ese líder que se carge a la espalda el equipo y tire como se suele decir del carro, puesto que Rubén Ramos anda lejos de su mejor versión y ni Julio de Dios ni Javi Rubio están asumiendo el rol de llevar las riendas del juego blanquiazul.

En estas circunstancias, la vuelta de Borja Sánchez se antoja como la mejor noticia a falta de saber los refuerzos que llegaran en el mercado invernal. Se habla de un mínimo de dos y un máximo de cuatro, pero todo dependerá de la capacidad de la actual directiva para rescindir ciertos contratos, algunos económicamente de gran peso en la actual plantilla. La directiva blanquiazul maneja una lista de al menos cuatro nombres con los que no se cuenta de cara a la segunda vuelta.

Mientras que a nivel de despachos se presenta un intenso regreso tras el parón navideño, Palop no ha dudado estas últimas semanas en darle galones a Borja Sánchez consciente de que el abulense puede aportar mucho a este equipo. El de L’Alcúdia ya le dio la titularidad en Cornellà, donde naufragó como todo el equipo, siguió en el once frente al Pobla de Mafumet donde estrelló en el poste lo que pudo ser el gol de la tranquilidad, y contra el Espanyol B jugó su tercer partido como titular consecutivo. Firmó una buena primera parte, con algunos detalles de calidad, pero bajó el pistón en el segundo periodo y terminó siendo sustituido.

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