Vuelve más fuerte

Néstor Abad está de vuelta tras un 2017 marcado por las lesiones que le apartaron de revalidar por tercer año consecutivo el título de campeón de España y le llevaron a competir con dolor en el Europeo de Rumanía y acudir muy corto de preparación al Mundial de Montreal, dos de sus objetivos de la temporada y que afrontó sin estar a su mejor nivel.

La Federación Española de Gimnasia anunciaba esta semana que el alcoyano será el representante español en la American Cup de Chicago (EE.UU) del próximo 3 de marzo. Sustituirá a Joel Plaza que es baja por una lesión de hombro. Para el alcoyano será su reencuentro con la competición al más alto nivel desde octubre pasado.

Néstor Abad despidió 2017 recuperándose de su enésima lesión tras romperse mientras entrenaba el dedo pulgar de la mano izquierda que le tuvo en el dique seco entre noviembre y finales de diciembre.

Un contratiempo que se sumó a la osteolisis en la clavícula, una especie de degeneración en el tejido óseo, que le obligó a parar durante tres meses, coincidiendo con el tramo más importante de la temporada. “Fue un año complicado por las lesiones. Ahora ya está todo olvidado y he empezado a entrenar los seis aparatos, aún no con toda la máxima dificultad, pero espero ir progresivamente aumentándola”, confiesa el alcoyano, que el próximo mes de marzo cumplirá 24 años.

CARTEL DE LUJO EN CHICAGO

La American Cup puede ser una buena piedra de toque para recuperar sensaciones. Habrá un cartel de lujo con la participación de los estadounidenses Yui Modauer y Allan Bower, el brasileño Francisco Barretto, el inglés James Hall, el alemán Phillipp Herder, el ucraniano Petro Pakhniuk, el japonés Kenzo Shirai o el chino Sun Wei: “He tratado de sacar la parte positiva a estos meses sin competir. Me ha venido bien para reflexionar y tomarme un respiro. La gimnasia es muy absorbente porque apenas tienes descansos y menos aún vacaciones. Me siento más fuerte y con muchas gana de empezar de nuevo”.
Los retos en su carrera no se detienen y 2018 será un año importante a nivel de Selección, puesto que se vivirá el primer asalto para estar en 2020 en las Olimpiadas de Tokio. El XLVIII Mundial de Doha (Catar) del 12 al 18 de octubre será clasificatoria y dará las primeras veinticuatro plazas. La pelea continuará en 2019, donde definitivamente quedará decidido el cuadro de doce equipos que estarán el año siguiente en las Olimpiadas.

A nivel individual, dos son los objetivos: los XVIII Juegos del Mediterráneo (del 22 de junio al 1 de julio en Tarragona) y el Europeo de Glasgow (Escocia) del 1 al 12 de agosto: “Son dos competiciones que me hacen mucha ilusión. Los Juegos del Mediterráneo es un campeonato muy bonito que esta edición tiene el aliciente de ser en España. Me gustaría mucho poderme clasificar en ambas competiciones en la final del All Around y una vez allí, quien sabe y poder aspirar a medalla”.

Ahora mismo, la participación de la Selección Española en la Copa del Mundo que sirve de test para los equipos europeos en estos primeros meses del año está en el aire debido a la plaga de lesiones en el combinado nacional, que va desde el medallista mundialista Ray Zapata, pasando por Adrià Vera, operado de rodilla el verano pasado, y ahora Joel Plata.

MIRAR EL FUTURO

Néstor Abad no hace planes más allá de Tokio 2020. Después de la Olimpiada decidirá con 26 años si sigue como gimnasta o decide dejarlo: “Dependerá de cómo me encuentre. Cuando deje la gimnasia mi intención es seguir vinculado al deporte en general. Quizás no sea como entrenador y más desde un aspecto psicológico y mental. Soy profesional de la gimnasia, me dedico a ello, los resultados son importantes, pero no es lo más importante, para mí tiene más valor disfrutar de lo que hago y que mi nivel gimnástico sea bueno”.

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