Quin desastre!

Así, con estas dos palabras y los signos de exclamación incorporados, el alcalde de Alcoy, Toni Francés, resumía el domingo en su cuenta de Twitter el resultado de las elecciones autonómicas en Galicia y País Vasco. No se puede decir más en menos. Ayer volvió a dejarnos su análisis sobre el descalabro socialista y la espiral autodestructiva en la que se encuentra inmersa la formación para tuitear: “Humildemente creo que no es momento para el Congreso Federal, dijimos primero solucionar la gobernabilidad y luego los liderazgos del @PSOE”.

Por estos lares, la peña anda a la greña. Que desastre. Los grupos municipales anoche se dieron besitos aprobando la declaración de 2017 como el Any Joan Valls, pero llevan una semana metiendo el dedo en el ojo ajeno a cuenta el coste del servicio de autobuses o de los 1.429 euros que nos ha costado responder a dos preguntas en la última comisión de Servicios Sociosanitarios. Se convocó para informar cuántos animales hay censados en Alcoy y cuántos inmigrantes hay en el padrón. Que no tiene nada que ver lo uno con lo otro, pero algo habría que preguntar para cobrar. Digo yo. Para contestar no se requirieron comisiones de investigación ni nada por el estilo. Hubiese sido más sencillo y barato preguntarle a Google. Los datos llevan meses publicados en la web municipal.

Los políticos se han convertido en un blanco fácil, pero queda descartado que tengan algo que ver con el desastre que se encontró un agricultor una mañana al comprobar que su plantación de girasoles había sido arrasada. Comisaría no ha llegado a abrir una investigación, porque la Unió de Llauradors tiene claro que han sido los jabalíes de Mariola. Pero quizá sí debería mandar a sus sabuesos para aclarar quién es el responsable de que la residencia Mariola carezca del personal suficiente –lo ha denunciado el CSI-F– y lo que es peor, que los ancianos permanezcan más tiempo del debido con los pañales puestos. Esa respuesta sí valdría la pena formularla en la comisión sociosanitaria.

Y por último, una buena noticia. El polígono Santiago Payá tendrá un nuevo acceso en otoño del 2017. Cinco años y medio después. Quin desastre!!!