¡Con el turismo hemos topado!

Estos días los medios de comunicación informan sobre la intención del socialista Ximo Puig de firmar un decreto que retira las competencias de turismo a las diputaciones y centralizar la gestión turística en un despacho en Valencia. Y digo intención porque el malestar de Compromis, sus propios socios de gobierno, y la fuerte oposición de la Diputación de Alicante hace que el president se replantee su firma. Lo que demuestra el grado de improvisación con el que se mueve este bipartito del botànic.

Y es que ¡Volvemos al centralismo valenciano de la época de Joan Lerma! ¡No es justo!, entre otras cosas, porque la provincia de Alicante aporta más de 1650 millones de euros al PIB, lo que supone aproximadamente el 50% del PIB turístico de la Comunidad Valenciana.

¿Alguien se cree que se defienden mejor los intereses, por ejemplo, de nuestro aeropuerto ALICANTE – ELCHE desde un despacho valenciano que desde uno de Alicante?. Si se firma este decreto es difícil imaginar que se vuelvan a dar los datos de 2015, en los que se han superado los 10,5 millones de usuarios con un incremento este último año de más de dos millones. Y al mismo tiempo es fácil imaginar qué aeropuertos incrementarán el número de pasajeros.

Ximo Puig, que algo debió aprender de Lerma pues era su jefe de gabinete, prometió en campaña electoral que trasladaría a Benidorm, la sede de la Consellería de Turismo. Si, a Benidorm, a la ciudad de España que lidera el número de pernoctaciones, con más de 5,2 millones.

Tristemente y una vez más, con los votos en cartera nos olvidamos de lo prometido señor Puig, ¿Cuántos votos robados a benidormenses y a alicantinos?, ¿tan barato sale engañar a la gente? ¿O es que nos toma por lelos?

Francamente estoy convencido que un valenciano de Morella no está en disposición de enseñar a los de Torrevieja, Santa Pola, Campello, Guadalest, Altea o Denia, como tienen que dirigir sus políticas turísticas.

Y además, a todas luces, es una maniobra para potenciar otros intereses diferentes a los de los alicantinos. Olvídense de turismo de interior, de Camí del Peix y de rutas verdes, etc. vuelve la Valencia fuerte a barajar y repartir las cartas.

Me llama poderosamente la atención que cada vez que nos visita el Molt Honorable nos dice que “quiere coser nuestra tierra”, entiendo que quiere decir vertebrar la comunidad valenciana, pero del dicho al hecho hay trecho, porque lo que va a conseguir es desquebrajarla.

Pero bueno, es una forma de actuar coherente, teniendo en cuenta que este señor no tiene reparo alguno en mostrar sus adhesiones als Països Catalans.