Juvenil y cantera

Quedará para siempre la duda de si el Juvenil A del Alcoyano ha bajado deportivamente o lo ha hecho en los despachos. Digo esto porque han sido dos jornadas, las finales, donde se han dado una serie de coincidencias que invitan a pensar que detrás de este descenso ha habido una mano negra que no quería que el Alcoyano siguiese en División de Honor. Los blanquiazules fueron hace diez días al campo del Castellón sabiendo que les iba a pitar un árbitro precisamente de Castellón. Los locales, que no se jugaban nada porque ya estaban descendidos, ganaron 4-2 con alguna que otra decisión más que sospechosa. A unos cientos kilómetros de allí, un Tavernes que llevaba varias jornadas sin conocer la victoria, logró ganar 0-1 en casa del Torre Levante, ya salvado. Dos resultados que le dejaban con pie y medio en la categoría y condenaban al Alcoyano a regresar dos años después a Liga Nacional. Pero los malpensados iban a tener más argumentos para dar rienda suelta a su imaginación. Para comprender mejor lo que se venía encima en la jornada final nada más había que echar mano a un mapa, mirar que guarda Tavernes en su polígono industrial, y bingo: las oficinas centrales de Mercadona. ¿Y quién es el dueño de la cadena de supermercados? Fernando Roig. ¿Y quién es Fernando Roig? El máximo accionista y presidente del Villarreal, a la sazón rival del Tavernes. El Villarreal, tercero a la sombra de Valencia y Levante, llevaba bastante tiempo sin perder, racha que justo se rompió al perder el domingo 2-0 en casa del Tavernes, cerrándose así de manera perfecta el círculo, con el conjunto valenciano un año más en División de Honor y aquí, mientras tanto, tirándonos de los pelos tras adivinar el final de toda la trama. Me consta que la directiva blanquiazul está indignada. Tampoco a nivel de cantera ha sido una buena temporada. Al descenso del Juvenil A hay que añadir la mala campaña del filial. Entre los dos equipos cuestan un pico y solo José Antonio ha tenido alguna aparición en el primer equipo. No me extrañaría que el año que viene hubiera un giro sonado de la actual política de cantera y se cortara por lo sano el grifo para las categorías inferiores. Tiempo al tiempo.

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