Nico Terol confía en conseguir un buen resultado en Japón
En uno predominan las curvas a izquierdas, y en el otro a derechas. Uno está custodiado por el océano, y el otro se aloja en mitad del bosque más misterioso. Eso sí, en ambos la lluvia imprevisible suele ser un elemento común. Se trata de Phillip Island, el último circuito pisado por la caravana mundialista, y Motegi, el próximo escenario del Mundial. Sin tiempo para el descanso, los pilotos de Moto2 viajan ya hacia el circuito japonés para participar en la penúltima prueba de la temporada, y poner punto final a la singladura que les tiene lejos de casa desde hace varias semanas. Los constantes desniveles de Motegi, su anchura, y el calor de la afición nipona, que nada envidia al fervor latino, hacen de la cita en Japón un pasatiempo excelente. Cuando parecía que Moto2 sería la categoría más disputada de todas, y llegaría con el título por decidir a Valencia, la situación ha dado un giro de 360º para poner el Mundial en bandeja a Espargaró, quien, salvo sorpresa mayúscula, podría proclamarse campeón el próximo domingo. La victoria de este en Phillip Island, la lesión de muñeca que mantendrá a Redding dos carreras fuera de juego, y la discreta actuación de Rabat el pasado domingo han provocado que el Mundial de Moto2 quede visto para sentencia.
Aunque Jordi Torres lleva tres años en el panorama mundialista esta es su primera temporada completa en el Mundial. Por eso, con 106 puntos, es indiscutiblemente el debutante del año en Moto2. Se ha ganado tal privilegio barriendo a sus rivales directos en dicha clasificación, y siendo una de las referencias de la categoría. También por su victoria en Alemania y por el podio del pasado domingo en Phillip Island. Se dirige a Japón con la sonrisa que le caracteriza, con la satisfacción del deber bien hecho y dispuesto a sumar un nuevo podio, en un circuito que ya el año pasado le encantó. Igualmente, su compañero, Nico Terol, está pletórico en esta recta final del curso. Saldó su paso por Phillip Island con excelentes sensaciones y, al igual que Jordi Torres, le encanta el circuito de Motegi. De modo que seguirá trabajando como hasta ahora, con la base que estableció en la pasada cita, para asumir el mismo reto que su compañero, subir al podio.
Nico Terol: “Nuestro paso por Phillip Island fue muy positivo. A pesar de que siempre me cuesta un poco adaptarme al circuito australiano, conseguimos progresar durante todo el fin de semana, y ser muy competitivos tanto en el entrenamiento oficial como en la carrera. Hasta el momento en la gira asiática estamos teniendo buenas sensaciones, eso nos hace ser optimistas de cara a la próxima cita en Motegi. El año pasado me fui recto en carrera y luego me tocó remontar, estoy convencido de que este va a ser distinto. El trazado me encanta, así que ya tengo ganas de empezar a rodar allí. Los dos circuitos que nos quedan se me dan bien, así que hay que aprovechar la coyuntura para lograr dos buenos resultados y despedir la temporada con buen sabor de boca”.