Sachsenring, última parada de Nico Terol antes de las vacaciones
Nico Terol, tras el test de Argentina, motivado para lograr un buen resultado en la carrera previa al receso estival
Mugello, Cataluña, Assen… Todos circuitos rápidos, largos y muy exigentes. El próximo fin de semana los pilotos de Moto2 se enfrentarán a un trazado también muy exigente pero más bien lento, y sin duda el más corto del Mundial para las categorías pequeñas. Sachsenring es una montaña de rusa de diversión para aquellos que se adaptan y una pesadilla para los que no lo hacen. Apenas tiene un metro llano en sus poco más de 3.600 metros de longitud. Algunas de sus frenadas requieren de las puestas a punto más precisas y es ya legendario el tobogán presente dos curvas antes de la meta. Sea como fuere, y pese a todas sus características, es el último gran premio justo antes del parón veraniego, y esa ya es una motivación importante para la mayoría de pilotos. En Moto2 la situación en la general sigue tan ardiente como siempre. Redding continúa líder con treinta puntos de ventaja, pero la victoria de Espargaró en Assen sumó un punto más de interés al panorama actual. También la sensación continua de que en la categoría intermedia del Mundial son bastantes los pilotos que pueden ganar alguna carrera en cualquier momento.
Contrariamente a lo que pueda parecer, el paso por Argentina en vez de ser fatigoso supuso una recarga de energía para el piloto MAPFRE Aspar, Nico Terol. El alcoyano recuperó sensaciones la semana pasada, reactivando su confianza para volver a la carga en el GP de Alemania. Después de dos carreras ligeramente controvertidas, Nico está dispuesto a recuperar su mejor versión, la que le llevó a la victoria en Austin y al segundo puesto en Mugello, para retomar su camino y afrontar el parón estival del mejor modo posible.
Nico Terol: “El test en Argentina me vino muy bien para desconectar mentalmente de las carreras. Allí disfruté mucho pilotando, volví a notar la moto mía y me vi seguro a la hora de intentar buscar los límites. Ha sido muy importante para nosotros reencontrarnos con buenas sensaciones en un test, después de dos carreras más duras de lo que esperábamos. Llego muy tranquilo a Alemania, con ganas de seguir disfrutando y dispuesto a sacar el máximo provecho de la próxima cita. Sachsenring es un circuito muy revirado y pequeño, de frenadas potentes. No es uno de mis circuitos favoritos pero normalmente me gusta pilotar allí. Tengo ganas de llegar y reeditar las sensaciones tan buenas que obtuve en el último día de test en Argentina”.